¿Cómo ayudo a alguien con depresión?

Ayudar a alguien que padece una depresión no es una tarea sencilla, aunque mostrar tu apoyo a alguien que padece este trastorno puede ser de gran ayuda en su proceso de recuperación. Muchas veces lo que decimos y no decimos afecta, es decir, influenciamos según cómo tratemos a una persona que sufre una depresión y ansiedad.

Sentimientos como la tristeza, la desesperanza, los sentimientos de culpa, de falta de utilidad, aislamiento, fatiga constante, irritabilidad o tener deseos de morir son advertencias importantes. Indican que hay que ayudar a una persona, ya que puede estar en un proceso depresivo.

En este artículo te damos las claves para ayudar a alguien que padece depresión.

¿Qué decir a una persona con depresión?

De forma errónea pensamos que una persona depresiva no hace las cosas porque voluntariamente no quiere. Y la realidad no es así, porque se siente que está incapacitada para realizar cualquier tarea que se le presente. Lo que sí puedes hacer es aconsejar (no obligar) que no se abandone ni deje de hacer sus tareas habituales, porque conseguirá una vida más ordenada que mejorará su bienestar.

Algunas de las frases que puedes decir a una persona con depresión:

“Tus sentimientos son válidos”. La afirmación de los sentimientos le ayudará a sentirse mejor, entendidos y aceptados.
“Estoy aquí para ti”. Saber que cuentan con el apoyo de alguien es reconfortante.
“¿Cómo puedo ayudarte?”. Preguntar en qué se puede ser útil hace que sea más fácil para ellos aceptar la ayuda.
“Eres importante para mí”. Reforzar el sentimiento de cariño y apego es un gran apoyo emocional.

¿Qué no puede hacer una persona con depresión?

La depresión puede perjudicar la capacidad de una persona para realizar las tareas de su vida diaria. Algunas que son más complejas para realizar son:

Toma de decisiones. No se sienten con la capacidad para tomar una decisión u opinar.
No disfrutar de ciertas actividades como antes. La persona depresiva pierde el interés y la capacidad de sentir placer al realizar una actividad que previamente sí disfrutaban.
Sentirse cansado, sin energía. La fatiga es uno de los síntomas de la depresión y puede provocar que la mínima tarea suponga un desafío.

¿Cómo tratar a una persona con depresión y ansiedad?

Seguro que te preguntarás cómo tratar a una persona con depresión, pues aquí te damos 10 formas de tratar a una persona con esta afección:

Mostrar empatía. Es importante saber que la depresión es un trastorno psiquiátrico que produce una alteración en la forma de sentir, pensar y actuar de la persona afectada. Y no es voluntario.
Ofrece apoyo y compañía. Hazle saber que estás con él/ella. Que explique qué le sucede y cuál es la mejor forma de ayudarlo/a. Escucha sin juzgar.
Ayúdale a pedir ayuda. Explicar que lo que le ocurre no es su culpa y que se trata de una enfermedad que, con apoyo, puede mejorar. Que sepa que no está solo y que con un profesional el proceso de curación será más rápido.
Fomentar la activación. Cuantas más actividades realice la persona afectada, más mejorará su estado de ánimo. La clave es motivar sin forzar para no generar sentimiento de fracaso.
Refuerza los logros. Es bueno premiar cada esfuerzo conseguido y que le haga tener sentimientos gratificantes y participar más.
Evitar los reproches. No recriminar si no hace lo que se le ha pedido, la culpa es de la enfermedad. Evitar comentarios como “pon de tu parte”, “no tienes motivos para estar así”, etc. Tampoco intentes razonar con sermones, son ineficaces.
Desviar la atención del sufrimiento. Seguro que la persona está centrada en lo negativo de sí mismo y lo que le rodea. Es importante esquivar temas negativos, sobre todo si están vinculados a la depresión.
Anticípate al riesgo. Hay personas con depresión que tienen ideas o deseos suicidas. No hay que restar importancia a este hecho. En caso de que sí tenga este problema, ponte en contacto con profesionales y sigue sus indicaciones.

Como ves, no son tareas complejas para ayudar a una persona con depresión. Recuerda que es una enfermedad y, como tal, el proceso de recuperación puede ser lento, pero al final de ello se sale, y si ves que la situación se vuelve seria o no sabes como proceder, consulta con psicólogos profesionales.