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Psicólogo adicciones Barcelona

En los últimos meses hemos podido leer una carta de Naciones Unidas referente al consumo de drogas en el mundo. Entre otros muchos datos, el escrito hace referencia a las políticas que desde los gobiernos de todo el mundo se han llevado a cabo con el fin de erradicar la droga en el planeta. La llamada War on Drugs que lideró el gobierno de EEUU para evitar la producción y comercialización de las drogas, se ha demostrado un completo fracaso. Hoy se consume más droga que nunca y existen más tipos de droga que en ningún otro momento de la historia.

Los presupuestos destinados a combatir la droga en el mundo se cuentan por billones de dólares, pero eso no ha hecho más que incrementar la producción y el consumo. Esto es debido, entre otras causas, a los propios efectos de la represión, que provoca una caída de los suministros y como consecuencia un incremento del precio de la droga, lo que acaba por estimular, de nuevo, la producción y el comercio. Movimiento circular que cierra sobre sí mismo. Repetición que nos evoca al propio sistema capitalista, donde la imposibilidad de colmar la falta nos empuja al vacío del sinsentido.

Algunos países ya han salido de esta gran coalición contra la droga, otros lo están debatiendo en sus foros internos. Algunos incluso ven en su reverso la oportunidad de la plusvalía ¿Cuanto estaremos dejando de ganar por no vender nosotros mismos la droga?. Esta consideración nos llevaría muy lejos de nuestro propósito aquí, pero sí cabe reflexionar acerca de los efectos de la prohibición y de hasta qué punto la legislación va en detrimento de la ley simbólica. Dicho de otra manera, no hay regulación sin subjetividad.

 

Psicoclínica Barcelona

Psicólogos Barcelona

Escrito por:
Mila Herrera
Directora de Psicoclínica Barcelona

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