Qué es la fobia social y cómo tratarla

Si estás leyendo esto, es muy probable que hayas escuchado hablar de la fobia social y te hayas preguntado qué es. La fobia social es un trastorno de ansiedad que puede afectar a personas de todas las edades la cual, puede hacer que una persona se sienta incómoda, ansiosa y a veces hasta paralizada en situaciones sociales.

Si estás lidiando con la fobia social, ¡no estás solo! En este artículo, vamos a hablar sobre lo que es la fobia social, sus síntomas y algunas formas de tratarla.

Fobia social

Etiqueta diagnóstica con un pasado y un presente polémico donde los haya, dada la inespecificidad sintomática, la inexistencia de una clara etiología así como por muchos otras variables que escaparían al tema que nos ocupa hoy.

Si se te ha pasado por la cabeza que puedas padecer este tipo de fobia o trastorno seguramente sea porque te están ocurriendo cosas que se manifiestan en un contexto social, es decir, tiene un peso importante lo social, ya sea a nivel imaginario (sólo con pensarlo, fantasearlo ya me genera ansiedad) o a nivel real, por ejemplo, cuando hablo en público.

Tomemos como muestra, solo el hecho de pensar que tenemos que tomar la palabra y dirigirnos a un otro, y solicitar algo, o llevar a cabo alguna gestión, estos simples actos puede desencadenar en uno, sentimientos y afectos de tipo ansioso que llevan a anticipar esas situaciones como totalmente aversivas, hostiles y amenazantes para el sujeto, que seguramente intente evitar y ahorrarse a toda costa. La terapia cognitivo conductual va a consistir en exposiciones grupales, en entrenamientos en habilidades sociales y en reestructuración cognitiva. En definitiva, se intentará exponer al individuo a aquello que teme para entrenar y mejorar habilidades, en este caso sociales.

En cambio la clínica de orientación psicoanalítica dirigirá el tratamiento psicológico de sujetos que motiven su consulta por esta vía, de otra manera, mucho más introspectiva, reflexiva, profunda, analítica y por lo tanto más estable y duradera en los efectos terapéuticos conseguidos y en la mejoría conquistada, acompañando al sujeto en sus asociaciones y elaboraciones sobre lo que le está pasando, cómo ha llegado a ese punto, cuál ha sido su historia, qué ha hecho en el pasado, qué hace en la actualidad, con qué puede relacionar lo que le pasa, es decir, en definitiva ayudar al sujeto a poder preguntarse sobre cuestiones que tienen que ver con uno mismo y con la historia que nos precede y que debido al hecho de que hablamos y somos seres de lenguaje, esta historia nos marca y nos condiciona de una determinada manera.

Fobia social síntomas

Los síntomas más comunes que se asocian a este tipo de “etiquetas diagnósticas” son por un lado, síntomas más psíquicos o emocionales como miedo a que otros perciban que uno está nervioso, miedo a hablar, hacer o actuar y/o ser humillado, miedo a ser juzgado u observado por otros, ansiedad excesiva en situaciones sociales cotidianas, preocupación intensa previa a una situación social…

Síntomas físicos, como una respiración rápida y agitada, ponerse colorado, náuseas, dolor de estómago, opresión en el pecho o taquicardias, voz rota o temblorosa, sensación de mareo o desmayo consecuencia de la hiperventilación y la propia sugestión, sudoración…

Síntomas que muchas personas relacionan con la conducta, es decir, con lo que acaban haciendo o evitando: por ejemplo, beber ante situaciones sociales para disminuir o controlar los nervios, necesidad de estar siempre cerca o junto a alguien conocido, escapar, escabullirse o huir de situaciones sociales, hasta el punto que limita e incapacita para una vida “normal”.

Las situaciones que más estrés pueden provocar y que más se asocian con estas dificultades son comer o beber en público, hacer llamadas de teléfono, conocer nuevas personas, hablar en público, hablar con personas que remiten a la autoridad, acudir a una cita, hacer pruebas o exámenes, ir a fiestas o actos sociales, ser el centro de atención, actuar delante de otras personas, usar baños públicos, ser o creer ser observado al hacer algo, ser o creer ser criticado o juzgado, etc.

Fobia social tratamiento

“Consejos” que circulan en lo social como de autoayuda: Desafía los pensamientos negativos y cámbialos por otros más positivos y realistas, controla tu respiración, practicar técnicas de relajación, encara tus miedos…

Todo esto está perfecto y queda muy bien, pero seamos serios y rigurosos cuando de sufrimiento y malestar subjetivo se trata. Si los sujetos que consultan pudieran hacer justamente eso que se les pide o se espera de ellos, no vendrían a nuestras consultas con sus dificultades y su angustia por delante, no tendría sentido.

Sólo con la realización de un trabajo personal, de una psicoterapia psicoanalítica uno podrá descubrir qué le ocurre, por qué le ocurre y cómo seguir adelante, en resumen, qué soluciones, invenciones o salidas crear para poder operar un cambio a nivel subjetivo y poderse librar de esa cantidad de angustia que paraliza, inhibe y al final coarta el día a día de muchas personas.